Con la respiración, la relajación y la visualización, podemos llegar a esos espacios muy adentro de tu ser, donde hay silencio, amor, paz, gratitud por la vida… donde flotas en tu luz divina.
¿Has sentido el placer y los beneficios de la meditación? Hay personas para las cuales la meditación es algo así como un misterio, algo que asocian con maestros hindúes, sentados en un cojín. Ellos efectivamente meditan, pero no son los únicos, y esa no es la única forma de meditar.
Meditar… hay muchas definiciones, estilos, escuelas y propósitos; pero sus beneficios son universales: mayor lucidez mental, ya que se descansa la mente; mayor salud física y emocional (se libera el estrés y sus secuelas, se reduce la presión sanguínea, aumenta la oxigenación); mayor conocimiento de nosotros mismos (concientizamos emociones, pensamientos, actitudes y nuestra capacidad de amar) y en consecuencia, expansión de la conciencia, crecimiento, evolución.
Es difícil poner en palabras una experiencia que siempre es distinta y es diferente para cada persona. Según mi experiencia y los comentarios de mucha gente, en la meditación está implícita la “entrega”, es entregarse al momento, entregar los pensamientos, las sensaciones y estar allí, simplemente.
En meditación, he sentido y experimentado muchas cosas: relajación profunda, silencio interior, paz, sensación de expansión, gratitud por la vida, amor.
Hay una difusa línea entre lo que es relajación, visualización y meditación. Para meditar tenemos que relajarnos; a mayor relajación de la mente mayor es el estado de meditación. Podemos visualizar, es decir, imaginar algo que nos lleve a relajarnos y a entrar en meditación. A veces llamamos meditar lo que realmente es una visualización. Digamos que la relajación y la visualización pueden ser los primeros pasos de la meditación.
Cuando meditamos en grupo, podemos sentir con más facilidad una onda de energía, muchas veces de amor, que nos envuelve y se expande desde nosotros. En este estado es fácil conectarnos con lo que representa para nosotros la divinidad; por lo que para mí meditar también es orar.
Hay muchas meditaciones: budista, metafísica, zen, trascendental, etc. Estaremos compartiendo algunas meditaciones, información y lecturas sobre el tema. Tus comentarios, experiencias y sugerencias son bienvenidos.
Relajación:
Como iniciación a la meditación, te recomiendo dedicar unos minutos diarios a la relajación consciente.
– Busca un sitio y un momento para ti; privado y sin interrupciones.
– Ayúdate con una música suave.
– Siéntate y pon tu atención a cada parte de tu cuerpo, poco a poco. Recórrelo desde los pies hasta llegar al cuero cabelludo.
– Si percibes alguna tensión, mueve esa parte suavemente para relajarla.
– Presta atención a la respiración. Siente cómo entra el aire y cómo sale.
– Si vienen pensamientos y emociones, deja que vengan y déjalos ir; recordando que son sólo una parte de tu actividad mental. Imagina que te separas de ellos y que se alejan suavemente.
– Siente el cuerpo; siente.
– Este es un momento para estar contigo; sólo contigo con lo que sientes, con lo que eres.
Te recomiendo:
Libro: Meditación y atención serena, de Ramiro Calle
Sitio web: http://www.osho.com